Los riesgos económicos siguen presentes y nuestro país no es el único que está viviendo las consecuencias. El desempleo permanece una constante, la pobreza extrema sigue y el panorama no parecer aclararse. Día a día surgen nuevas crisis, la problemática que enfrenan los mercados laborales es cada vez peor y la poca ayuda gubernamental está provocado nuevas ruinas financieras.
Nuestro bolsillo siempre debe ser prioridad, pero es imposible tener control sobre lo que sucede en el mundo externo. Nuestras finanzas personales deben estar protegidas, pero no tenemos manera de predecir el futuro, de tener exactitud sobre los imprevistos y de conocer el momento en el que las vicisitudes de la vida puedan atravesarse en nuestro camino. Lo que sí podemos hacer es educarnos financieramente para proteger nuestro capital y sobrellevar los tiempos económicamente complejos.
La economía mexicana necesita renovarse y encontrar la salida a este gran caos, pero si no analizamos la problemática y entendemos la raíz del conflicto, será difícil construir sobre un terreno certero. Las finanzas mexicanas necesitan un impulso para crecer y mantenerse, necesitan nuevas estrategias que le permitan mejorar y herramientas que ayuden a generar un cambio real. La economía de nuestro país necesita vivir un cambio drástico, empezar desde cero y encaminarse hacia la recuperación.
No siempre tenemos certeza de lo que sucederá en el mundo externo y de la manera en que correrán nuestras finanzas personales. No siempre conocemos el impacto que el universo pueda tener sobre nuestros bolsillos y la manera en que nuestra situación financiera se pueda ver afectada por decisiones ajenas a nosotros. No siempre sabemos lo que sucederá a nuestro alrededor, pero con una sólida educación financiera, podemos aprender a cuidar nuestras finanzas personales sin permitir que sufran grandes altibajos.
La crisis económica sigue y, aunque parece que vamos dando pasos hacia la recuperación, encontramos baches en el camino que nos impiden avanzar. Las finanzas de nuestro país no logran tomar vuelo y las distintas actividades no consiguen reactivarse del todo. Una posible nueva ola de contagios está en la mira y podría retrasar la reactivación económica de nuestro país.
Ahorrar trae grandes beneficios a nuestra vida cotidiana y nos protege ante los imprevistos que van surgiendo en el camino. Ahorrar es esencial si queremos conseguir salud financiera, si pretendemos alcanzar la independencia económica y si buscamos que nuestros días estén libres de estrés financiero.
Las pérdidas económicas causadas por la pandemia han traído graves consecuencias y se han infiltrado en distintos sectores. Muchas áreas han sufrido caídas monstruosas y no logran recuperarse. Algunos sectores viven al día mientras que otros han tenido efectos positivos. La incertidumbre financiera sigue presente y no es claro el camino hacia la recuperación.
Un alto porcentaje de la población mexicana carece de educación financiera y no consigue administrar sus recursos de manera adecuada. Un gran número de mexicanos evita hablar sobre sus finanzas personales y tiene miedo a invertir parte de su capital. Una gran parte de la población mexicana se escuda bajo la premisa de tener una baja o nula educación financiera y poco acceso a instrumentos financieros innovadores, pero la realidad es que todos podemos adquirir conocimientos y emprender.
Las micro, pequeñas, medianas y grandes empresas de nuestro país sufrieron un golpe monumental en materia económica. Muchas pymes y mipymes se vieron en la necesidad de suspender sus actividades de manera temporal y otras más bajaron sus cortinas permanentemente. La crisis económica que acentuó la pandemia sigue teniendo efectos negativos sobre muchos micronegocios de nuestro país y la situación deplorable por la que estamos pasando no parece tener fin.
No hablamos mucho sobre la educación financiera, pero tenemos claro que es indispensable en nuestra vida. No solemos dar prioridad a informarnos cotidianamente acerca de nuestras finanzas personales, pero es fundamental si buscamos salud financiera y si pretendemos alcanzar la independencia económica.
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