Reconoce tu situación financiera y ¡mejórala!

Reconoce tu situación financiera y ¡mejórala!

Reconoce tu situación financiera
Reconoce tu situación financiera

¿Sientes que es imposible mejorar tu situación financiera y piensas que te sobrepasa? ¿O estás en el extremo contrario y acabas de alcanzar una buena racha financiera? Sea cual sea tu situación, siempre es bueno pensar en cómo mejorarla. No se trata de ponernos metas imposibles y cansarnos, sino de establecer pequeños hitos que nos permitan crecer de forma más sencilla cada vez. Aquí te dejamos una guía: reconoce tu situación financiera y mejórala de forma simple. Sigue leyendo para saber cómo.

¿Cómo lograr tus metas financieras?

Es muy común que abandonemos nuestras metas por desmotivación. Esto ocurre más seguido de lo que nos gusta admitir porque perdemos el impulso inicial que nos brinda el optimismo de la motivación. Eso es completamente normal y más frecuente de lo que crees. Sin embargo, se puede corregir de manera sencilla.

Conocer lo que queremos conseguir es un buen punto de inicio. Muchas veces confundimos esto con poner cifras y plazos. Eso es parte de los medios que nos permitirán conseguir nuestros objetivos. Sin embargo, nuestras metas son las cosas y experiencias que deseamos. Debemos centrar nuestra atención en eso. Por ejemplo, tu meta no es una cifra para cubrir los gastos de tus vacaciones, tu objetivo es la experiencia de vacaciones que quieres: el lugar, los días, las actividades, las personas que te acompañarán. Piensa en esto cuando establezcas tus metas.

Es más fácil mantener la motivación cuando sabemos qué es lo que buscamos. Si sólo lo vemos como cifras se vuelve algo más frío y abstracto. Esto provoca que te abrumes y prefieras abandonarlo. Si quieres saber más acerca de cómo alcanzar tus metas financieras, puedes leer este artículo. Una vez que tengamos las metas definidas, podemos recuperar nuestro ánimo y, con eso, saber cómo queremos y podemos mejorar nuestra situación financiera.

Reconoce tu situación financiera: Evaluar y detenerse

Ahora bien, para reconocer tu situación financiera necesitas tiempo y paciencia. No es una operación que puedas hacer de la noche a la mañana, sobre todo si llevas tiempo sin prestarle atención a tus finanzas. Lo primero que debes hacer es buscar ser realista con este proceso. La única manera en que funcionará es saber qué tan mal o qué tan bien te encuentras. A veces, aunque sea desolador, es mejor conocer la realidad para saber cómo cambiarla de forma eficaz.

Lo importante también es preguntarnos para qué y cómo queremos mejorar nuestra situación financiera y qué significa e implica esto. Si sólo nos ponemos metas irrealizables, lo único que vamos a conseguir es frustración y abandonar nuestros objetivos. Incluso, es posible que empeoremos nuestra situación por esto. Por eso, nuestra prioridad debe ser volver nuestras metas algo que podamos mantener y ser constantes. Reducir el estrés financiero se traduce también en reducir el estrés en nuestra vida. Así podemos aprovechar y disfrutar mejor de nuestras metas. Lee más acerca de esta relación en este artículo.

Una buena manera de alinear tu tranquilidad con tus finanzas es implementar las finanzas slow. Este tipo de enfoque te permite lograr más con menos esfuerzo y distribuir tus objetivos en el tiempo. Puedes conocer más al respecto en este enlace. Lo que debes buscar es desarrollar hábitos que sean sostenibles a largo plazo, detenerte y evaluar tu situación. No buscar la inmediatez, sino lo duradero. Detenerse e ir lento es saludable.

Reconoce tu situación financiera: Educación y experiencia

Una vez que tengas el tiempo y paciencia destinado a reconocer tu situación financiera, es hora de comenzar. Para que puedas hacerlo es necesario hacer un importante ejercicio de consciencia y ser realistas con nuestros hábitos hasta ahora. No se trata de juzgarlos, sino de saber situarnos en forma honesta:

  1. ¿Cuáles son tus ingresos y egresos? ¿Puedes llevar un registro detallado por un plazo definido: una semana, un mes, quizás? Así conocerás tus posibilidades realistas.
  2. ¿Qué hábitos te gustaría mejorar? ¿Gastas mucho en compras impulsivas, comidas fuera de casa, salidas improvisadas, regalos para otras personas?
  3. ¿Te dejas llevar por las promociones y gastas más de lo que puedes adquirir?
  4. ¿Te gustaría saber más acerca del mundo de las finanzas? ¿Cómo puedes conocer más acerca de productos y servicios financieros? Puedes conocer más de esto aquí.

Estas preguntas son conceptos clave para direcciones y reconocer nuestra situación financiera. Si quieres conocer más consejos con respecto a este tema, puedes ir a este artículo.

Precisamente, si lo que quieres es mejorar tu situación, es imprescindible que adquieras información, experiencia y conocimientos. Aprender más acerca de finanzas nos permite desarrollar mejores hábitos. La experiencia hace al maestro. Puedes ahondar en este tema en este enlace. Además, recuerda que esto no se limita a saber cuánto ahorrar e invertir, sino a cómo incorporar estos hábitos en nuestras acciones cotidianas. Desarrollar nuestra inteligencia en estos temas nos permitirá tomar mejores decisiones. Puedes saber más acerca de esto en este artículo.

Reconoce tu situación financiera: Instituciones

Finalmente, al reconocer tu situación financiera puedes acceder a nuevas herramientas. Es posible que estés atravesando un momento económico difícil o que, al contrario, sea un buen momento tras una mala racha. Sin embargo, parte de las finanzas slow y los buenos hábitos financieros consiste en buscar la mejora continua. Por eso, es importante que desarrolles estrategias que se adecuen a lo que quieres.

Una buena manera de lograr esto es aprovechar las herramientas del mercado. Por ejemplo, puedes apoyarte de las instituciones financieras. Puedes comenzar con las tradicionales: los bancos. Aunque también puedes buscar más allá con instituciones como las SOFIPOs (que son accesibles para sectores populares o comenzar con cantidades pequeñas). Y, finalmente, también puedes investigar con las Fintech si lo tuyo es la tecnología y lo digital. En este enlace puedes conocer algunas de las opciones.

El cambio es posible

Sólo al enfrentarnos con nuestra situación de manera realista es que podremos guiarla hacia dónde queremos ir. Recuerda que lo más importante es considerar las experiencias y recompensas que buscamos para mantener nuestra motivación. Las cifras son cambiantes y pueden ajustarse. El dinero no debe ser tu objetivo sino tu medio. Si cambias tu enfoque, la administración de tus finanzas mejorará. Ese es un secreto clave para comenzar el cambio. Así que, ahora ya lo sabes, cambia tu chip y comienza a generar estrategias para disfrutar en lugar de angustiarte.