No hay dos iguales
Cada ser humano es único e irrepetible. Cada persona piensa de manera distinta. Cada individuo opera de la forma en que mejor se acomoda. Compararnos es irrelevante y solo conlleva a altos niveles de insatisfacción, pues la vida financiera de cada persona es completamente distinta y la situación económica de cada ser humano no es reproducible.