Una buena administración es un ganar-ganar

Una buena administración es un ganar-ganar

Las finanzas personales se pueden resumir en cuatro puntos esenciales: el capital que guardamos o gastamos, la tasa de interés que pagamos o que nos pagan, los riesgos que enfrentamos y el tiempo que tenemos. Al ahorrar, nos damos cuenta de que reservar capital no solamente depende de nuestros ingresos, pues hay diversos factores, tanto internos como externos que influyen.

Los expertos en finanzas personales coinciden en que hay dos grandes obstáculos que se interponen en el camino de muchas personas a la hora de ahorrar. El primero de ellos tiene que ver con la demora, es decir, con la capacidad que tenemos de aguantar la tentación de recibir un beneficio inmediato, a cambio de una mejor recompensa en el futuro. El segundo obstáculo tiene que ver con la manera en que entendemos el concepto de ahorro y las implicaciones que tiene a nivel personal.

Ahorrar de manera inteligente nos traerá grandes beneficios a futuro. Para lograr un ahorro exitoso, es elemental tener una buena administración de nuestro capital, así como desarrollar hábitos puntuales. Es fundamental establecer metas claras y comprometernos a cumplirlas, así como buscar formas de pagar menos por aquellas cosas que consumimos de manera cotidiana. Es crucial pensar en los pequeños ahorros que podamos lograr en nuestro propio hogar. 

Una vez que logramos consolidar hábitos de ahorro sanos, es vital pensar en invertir el capital ahorrado. El ahorrar mediante un método tradicional, como una alcancía o una cuenta de ahorros, no nos aportará nada a futuro, pues nuestro capital perderá su valor con el paso del tiempo. Es vital encontrar la mejor alternativa a nivel personal, alguna que permita que nuestro capital crezca y genere retornos y rendimientos. 

Aquí entramos al mundo de las inversiones. A grandes rasgos, invertir en tan solo lograr que el capital que hemos acumulado comience a producir dinero por sí mismo. Una vez que logramos invertir, la disciplina, la paciencia y la constancia son clave. 

El ahorro y las inversiones son conceptos esenciales en el mundo de las finanzas personales. El aprender a ahorrar y a invertir nos simplificará la vida de manera considerable y nos abrirá las puertas hacia una libertad financiera y una independencia económica. Una buena administración se traducirá en un ganar-ganar.