Forever 21 en bancarrota

Algunas tiendas abren y otras cierran. Algunas prosperan y parecen no tener freno. Otras se van a la quiebra. La diferencia es la manera en que se lleva a cabo la administración del negocio. La tienda de moda rápida Forever 21 parece ir en contra de la norma, logrando un crecimiento cuando muchos establecimientos no lograban florecer. La empresa se fue expandiendo poco a poco por territorios imprevistos alrededor del mundo. La empresa logró su máximo apogeo en cuanto a moda e inversiones monetarias. Forever 21 aparentaba ser una compañía estable, sólida y sin ninguna posibilidad de quebrar. Pero no todo es lo que parece.

Las ventas comenzaron a disminuir, el crecimiento se detuvo y comenzó la caída. Los niveles de rentabilidad ya no eran los esperados y la parte operativa y administrativa del negocio tomó la decisión de cerrar sus puertas en algunos ámbitos y de comenzar a hacer más pequeños los espacios de los establecimientos que aún seguían activos. La decisión fue tomada con firmeza, sin embargo, las mentes detrás de todo este embrollo prefirieron no hacer movimientos tan notorios y tajantes. 

El capital se fue perdiendo poco a poco hasta llegar a un punto de quiebre. Aparentemente las buenas intenciones no fueron suficientes y las decisiones tomadas no fueron del todo benignas. Malas decisiones, falta de estructura y falta de comprensión. Un conjunto de factores que llevaron a la empresa a un estado de bancarrota. Poco a poco la compañía se fue despidiendo de algunos territorios. Lentamente Forever 21 comenzó a cerrar sus puertas en algunas zonas, regiones y países alrededor del mundo. 

Las expectativas no se ven muy positivas y quienes han analizado el panorama no apuestan a un crecimiento. Cada vez hay menos establecimientos físicos y menos empleados. Las perspectivas de los expertos apuntan a un quiebre de la empresa. El futuro de la compañía está en duda y pisa terreno incierto. Quizá hizo falta una mejor estrategia de venta en línea. Quizá hizo falta una mejor administración. Quizá el financiamiento con el que contaban no fue suficiente. Aparentemente las estrategias de compra y venta dejaban mucho que desear. Las expectativas se fueron perdiendo y se detonó un estado de bancarrota. La moda rápida llegó a un punto en que comenzó a irse para abajo y se llevó a Forever 21 de corbata. Muchos cambios que condujeron a conflictos y complicaciones. 

¿En qué terminará todo esto?