Lectura para fomentar tus ahorros personales
Normalmente cuando a alguien se le quiere incitar o enseñara ahorrar, la respuesta puede ser a la defensiva. Es una de esas cosas que todos sabemos que es lo correcto para hacer pero que nos cuesta trabajo y solemos evitarlo. No te preocupes, es normal.
Al hablar de destinar una parte de tu dinero a un lugar en el que no planeas usarlo por un tiempo suena un poco desanimante, ya que todos queremos poder ver los frutos de nuestro esfuerzo y trabajo lo antes posible. Para animarte un poco a ello y para que veas que no es tan difícil, en esta entrada hablaremos sobre el ahorro, opciones para hacerlo y algunos tips que te ayudarán para iniciar.
Las finanzas personales se llaman así porque es el individuo el que decide como administrarlas y cómo gestionarlas. Esto quiere decir que se deben adaptar a cada persona, a su situación y a sus necesidades. Hay diferentes formas de ahorrar:
Una opción pueden ser las cuentas en las que tu dinero está virtualmente guardado y tú tienes acceso a él de inmediato o después de un cierto plazo. Algunas de las opciones son los Bancos, las Afores, las microfinancieras y las cooperativas. Estas instiruciones son seguras ya que están reguladas por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y, muchas veces, dan un rendimiento a nuestro dinero.
Otra opción útil son los metales preciosos. Además de ahorrar, comprar metales preciosos es una forma de invertir. Hay que esperar un tiempo para ver rendimientos reales, pero es una beuna práctica para fomentar la paciencia que es necesaria para el ahorro.
La siguiente forma de ahorro es la compra de divisas. Para ahorrar en divisas hay que conocer sobre el tema, sin embargo esto te hará familiarizarte con el dinero, su valor y con la situación económica de nuestro país y del mundo. Te recomendamos el ahorro en una moneda extranjera para recuperar el valor de nuestro dinero que constantemente se devalúa.
Para ahorrar en tus gastos, recuerda siempre hacer un balance entre la necesidad de ese producto y la utilidad que podría tener tu dinero gastándose en algo más. Adicionalmente, te recomednamos generar un ahorro recurrente en tu cuenta bancaria, con el fin de que un porcentaje de tus ingresos se dedique al ahorro y no al gasto inmediato.
Pónte las pilas y verás cómo el ahorro es un hábito sano y deseable.