Interés simple
El interés simple es, por definición, la tasa de interés aplicada sobre un capital origen que permanece constante en el tiempo y no se añade a periodos sucesivos. El interés simple se aplica para los pagos o cobros relacionados con el dinero que se usará durante un lapso determinado. Es importante saber que el interés simple se calcula únicamente sobre el capital inicial, sin importar si se relaciona con pagos sobre préstamos o cobros sobre depósitos.