Interés devengado

El interés devengado, por definición, es el importe de intereses que corresponde a un periodo de tiempo ya transcurrido y que aún no ha sido pagado ni cobrado. El interés devengado es un término contable que tiene que ver con el importe de intereses en un periodo de tiempo específico y se va acumulando desde el abono inicial. El interés devengado va creciendo y avanzando conforme pasa el tiempo, sin importar la duración. El interés devengado es aquel que resulta de una inversión o un adeudo y puede ser mensual, semestral o anual. 

Es importante saber que el interés devengado tiene que ver con un derecho contraído o con una obligación financiera que no ha logrado ser liquidada. El interés devengado surge desde el inicio, en el momento en el que se contrae un compromiso financiero y puede ir incrementando o disminuyendo con el paso del tiempo. 

El interés devengado sirve para tener claridad financiera, pues nos permite conocer el panorama completo y estar al tanto de lo que nos espera a nivel contable. El interés devengado funciona como una herramienta financiera que nos ayuda a determinar la tasa de interés o el porcentaje de interés que tendremos que pagar o recibir en un plazo de tiempo previamente estipulado. Al conocer el interés devengado, tendremos noción de la cantidad exacta que pagaremos o recibiremos. 

Hay distintos tipos de intereses devengados, entre los cuales están: los intereses devengados a cargo, los intereses devengados a favor y los intereses nominales devengados.

Los intereses devengados a cargo surgen como el resultado de un adeudo pasivo y que aún no se ha podido liquidar. Los intereses devengados a favor son el resultado de una inversión de activos que están esperando para ser cobrados. Finalmente, los intereses nominales devengados son aquellos intereses vencidos, sin importar si su estatus es pagado o no pagado.