La responsabilidad es nuestra
Los gastos hormiga se cuelan por nuestros bolsillos, convirtiéndose en un gran dolor de cabeza. Los gastos innecesarios son parte del día a día y muchas veces no los tomamos en cuenta. Los gastos inocentes, que parecen imperceptibles, suelen convertirse en una carga a futuro. Centavo a centavo vamos sumando grandes cantidades de dinero que podríamos haber ahorrado. Aprender a administrar nuestros recursos con inteligencia financiera es esencial para no caer en un círculo vicioso.