Prosofipo: un paso adelante
Las Sofipos son Sociedades financieras populares en las que todos tienen la capacidad de solicitar un crédito y acceder a una caja de ahorro. A pesar de que las Sofipos presentan muchas ventajas para sus clientes, estas también pueden resultar riesgosas si no cumplen con las regulaciones y especificaciones que, tanto la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, como la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF) establecen para que las Sofipos puedan operar.
Uno de los mecanismos institucionales más importantes en materia de regulación y apoyo al buen funcionamiento de las Sociedades financieras populares es el Prosofipo: el Fondo de Protección de las Sociedades Financieras Populares y de Protección a sus Ahorradores. Este organismo se encarga de detectar problemas operativos y administrativos de las Sofipos y ayudar a su corrección. En caso de no resultar esta corrección exitosa, el Prosofipo aporta dinero para proteger a los clientes de pérdidas del capital invertido.
Recientemnete, a finales de 2021, se comenzó a implementar un modelo para detectar riesgos de manera temprana en las 38 Sofipos que están actualmente en operación. Con este modelo de detección se busca proteger los recursos limitados del Prosofipo, así como evitar que más Sofipos caigan en una posición de incumplimiento y abandono de sus clientes. Entre las propuestas para el modelo se encuentra la instauración de un mecanismo de aportaciones diferenciadas al Fondo. Lo que se lograría con esto es que las entidades que presentan mayores índices de riesgo aporten más recursos. El deterioro de las organizaciones se podrá monitorear y registrar de manera más sencilla y constante con el nuevo modelo.
Recientemente, se identificaron dos Sociedades financieras populares que están en riesgo debido a problemas de solvencia. Una de ellas es Libertad Servicios Financieros y la otra es Financiera Auxi. La primera es, curiosamente, la entidad más grande del sector, ya que cuenta con 2.2 millones de clientes. No obstante, en el primer tercio del 2021 esta Sofipo se encontraba en la categoría número 3 de alertas tempranas, en un esquema en el que estar en la categoría 1 es lo ideal. La segunda, Financiera Auxi, se encontraba en abril de 2021 en la categoría número 4. Estar en este nivel de riesgo puede tener como consecuencia la revocación de la licencia por parte de la CNBV.
El Prosofipo ayuda, tanto a clientes, como a las Sofipos, ya que verifica el buen funcionamiento del mercado. Sin ella, los casi 5 millones de clientes de Sofipos en el país enfrentarían riesgos mucho más grandes al invertir en ellas.