Malas noticias para las papelerías

Malas noticias para las papelerías

La crisis del desempleo está en incremento y las pymes han sido altamente afectadas. Muchos negocios independientes se han visto atrapados por la pandemia y muchos de ellos han tenido que cerrar sus puertas de manera definitiva. La crisis del desempleo no parece ceder, al menos no a corto plazo, y el impacto económico es y será monumental. Las Pymes contribuyen a la economía mexicana de manera considerable, por lo que los efectos del quiebre de muchos micro, pequeños y medianos negocios podría tener un impacto monstruoso sobre las finanzas de nuestro país.

Las cifras de desempleo van en incremento y no parecen tener freno. Los datos confirman que muchos pequeños negocios han tenido que bajar sus cortinas de manera permanente. El autoempleo parece estar en decadencia, pues la actualidad ha obligado a muchas Pymes y MiPymes a hacer pausas permanentes.

La crisis económica actual nos ha orillado a tomar decisiones precipitadas y a priorizar nuestro día a día de manera distinta. La crisis económica actual ha conseguido que muchas pequeñas empresas suspendan sus labores debido a una disminución significativa en sus ventas. Muchas Pymes y MiPymes están en números rojos mientras que otras de plano no han logrado sobrevivir. 

La situación se ha vuelto insostenible, especialmente para muchas papelerías del país. Las circunstancias han generado cambios radicales en nuestros hábitos de consumo y muchas papelerías mexicanas se han visto dramáticamente afectadas. Las cosas han cambiado. La nueva normalidad nos ha incitado a pensar y a actuar de manera distinta. Los colegios funcionan de manera remota, lo cual ha provocado una caída importante en las ventas de muchas papelerías de nuestro país. 

La crisis económica ha causado un desajuste monumental y no parece haber señales de recuperación a corto plazo. Muchas papelerías están sufriendo las repercusiones de la pandemia a flor de piel. La nueva normalidad nos ha presentado con un panorama distinto al que estamos acostumbrados y no parece haber vuelta atrás.