Categoría: Finanzas

Los juegos de la mente

Nuestra mente es muy poderosa y de pronto nos juega de maneras curiosas. Nuestra mente tiene una gran influencia sobre nuestras decisiones, sobre nuestra perspectiva y sobre la manera en que operamos en el día a día. Nuestra mente tiene un gran impacto sobre nuestra salud física, mental, emocional y financiera, por lo que aprender a amaestrarla es esencial para tener estabilidad económica.

Por la salud financiera

Tener conocimientos financieros es esencial para alcanzar la salud financiera e incrementar nuestra calidad de vida. Conocer el mundo de las finanzas personales es fundamental para tomar mejores decisiones, para enderezar nuestros conflictos financieros y para vivir la vida que soñamos. Tener bases sólidas y educarnos financieramente nos traerá grandes beneficios y conseguirá que nuestros días transcurran con mayor tranquilidad.

El optimismo y el pesimismo pueden coexistir

La vida es incierta y los mercados financieros pueden cambiar de la noche a la mañana, por lo que debemos estar preparados e ir haciendo aportaciones voluntarias a nuestra cuenta de ahorro. Nuestra situación financiera puede verse alterada en un abrir y cerrar de ojos, pero si estamos al tanto de nuestra situación económica, podremos actuar acertadamente antes de que sea demasiado tarde.

El componente sorpresa

Las inversiones siempre tienen un componente sorpresa y generan incertidumbre incluso entre los grandes exitosos. Las inversiones pueden ser sencillas o complejas, todo depende de la manera en que las abordemos, de la confianza con la que iniciemos y de los conocimientos con los que contemos. Conforme pasa el tiempo y vamos adquiriendo mayor experiencia, las inversiones suelen irse facilitando, vamos eligiendo mejor y vamos decidiendo con mayor seguridad.

Cambiando creencias

Nuestras conductas hacia el dinero podrían ser un reflejo de nuestra salud mental. La relación que tenemos con nuestro capital puede tener sus raíces en aprendizajes que tuvimos durante nuestra primera infancia. La manera en que percibimos nuestros recursos y organizamos nuestra vida financiera podría venir de experiencias que vivimos durante nuestros primeros años de vida y con creencias que fuimos internalizando en el camino.

Sin auto engaño

Nuestra salud mental, nuestra salud física y nuestra salud financiera están íntimamente relacionadas y una suele tener efecto sobre otra. Cuando nuestras finanzas personales están bajo control, solemos tener armonía, pero cuando nuestra mente nos juega chueco, todo puede salirse de control.

Seamos auténticos

El dinero solo es una alternativa más que nos permite encaminarnos hacia la independencia económica El dinero es solo una vía distinta para alcanzar nuestras metas. El dinero es solo un elemento que nos guía hacia nuestros objetivos financieros y nos permite vivir con mayor libertad.

Somos seres singulares

La realidad es que no es tan complejo forjarnos el hábito del ahorro y encaminarnos hacia la calidad de vida que queremos. La realidad es que comenzar a dar pasos hacia la salud financiera es más sencillo de lo que imaginamos. La realidad es que formar parte de una cultura financiera sana es viable, independientemente de nuestra situación económica y del monto de nuestros ingresos.

Pasos sencillos

Manejar nuestras finanzas personales de manera adecuada es fundamental, especialmente en momentos en los que sentimos que el mundo externo juega en nuestra contra. Administrar correctamente nuestra vida financiera es vital, especialmente si vemos el dinero como nuestro enemigo y sentimos que lo vamos perdiendo a través de malas decisiones. Mantener estabilidad financiera es esencial, especialmente cuando sentimos que nuestra vida financiera tambalea y lo importante se nos sale de control.

Crecer es aprender

Crecer es sinónimo de aprender y de responsabilizarnos por nuestros propios actos. Crecer implica conocer, informarnos y tomar las riendas de nuestra vida. Crecer involucra entender nuestro mundo interno, tener nociones del mundo externo e ir forjando nuestro camino hacia la calidad de vida que deseamos. Crecer es luchar día a día para mantener nuestra vida en orden y parte de ello implica organizar nuestras finanzas personales de manera acertada.