Una delgada línea
Hay una línea muy delgada entre el estrés y la tranquilidad financiera. Hay una línea muy delgada entre saber administrar nuestros recursos y vivir al día. Hay una línea muy delgada entre ver el panorama completo y enfocarnos a ver los pequeños detalles. Una buena salud financiera es viable y mucho más simple de lo que pensamos. Comenzar a sanar nuestras finanzas personales es sencillo y, una vez que lo logremos, obtendremos una sensación de bienestar irrefutable.