Proteger tus finanzas: ¿Cómo cuidar tu dinero?
Todos sabemos lo que se siente tener deudas o gastos impostergables y tener que recurrir a un préstamo para hacerles frente. Por otro lado, también sabemos lo que es estar del otro lado y ser a quien alguien más recurre para ayudar a solventar sus gastos más urgentes. En estos casos, debes proteger tus finanzas pese a la confianza que tengas. Así es, la mayoría de las personas recurre primero a un amigo, familiares conocidos para el préstamo de dinero, antes que a una institución bancaria. La razón: confianza, cercanía y evasión a trámites burocráticos.
Vivimos, sin duda, una época e incertidumbre económica y de amenazas constantes de crisis, sin que las obligaciones de pago se disuelvan. Por esta razón, en esta entrada te contaremos de los mejores consejos para que si realizas préstamos entre personas cercanas, tus amistades y relaciones no se vean afectadas por esto. Sigue leyendo y aprende a proteger tus finanzas tus relaciones interpersonales de los problemas por dinero. Y si eres tú quien necesita un préstamo puedes leer este artículo para conocer algunas consideraciones.
Asegúrate de tener información completa y confiable
Ante cualquier transacción económica, formal o informal, uno de los elementos principales es la transparencia. Es importante que todas las partes involucradas tengan la misma información sobre las cantidades, términos y condiciones de la transacción. En este punto, queremos hacer hincapié en la transparencia sobre el propósito del préstamo. Es decir, si alguien te pide dinero, es importante que sepas para qué lo quiere esa persona, para qué se usará el dinero que prestarás.
Aunque existen opciones de préstamos exprés, muchas veces no se toman porque siguen teniendo algunos inconvenientes o no se ajustan a lo que necesitan. Si quieres saber más en qué fijarte para tomar alguno de ellos, lee esto. Y la razón es sencilla, muchas veces, las personas asumen que, a diferencia de un banco, los conocidos como familia o amigos no indagarán. Tampoco piensan que harán preguntas incómodas con respecto al destino del dinero que te están pidiendo. Sin embargo, es importante que lo sepas por las siguientes razones:
- Debes estar seguro de que tu dinero no acabará en manos equivocadas o se usará con fines ilícitos o peligrosos.
- Tener información clara te permitirá decidir más fácilmente si prestas o no el dinero, dependiendo de la importancia con la que consideres el asunto.
- En caso de que decidas prestar el dinero, te ayudará a evaluar si la cantidad que te están pidiendo es sensata o si puede ajustarse.
Proteger tus finanzas: Eligiendo con responsabilidad
Puede ser que un amigo se acerque para pedirte dinero para hacer frente a la renta de este mes o la colegiatura de sus hijos. Estos son gastos importantes e impostergables. Por otro lado, puedes estar poniendo tu dinero en riesgo para financiar actividades de ocio. Incluso puede ser que sea para sostener un estilo de vida elevado de quien no puede pagarlo. Depende de ti elegir si quieres hacerlo o no. Proteger tus finanzas consiste en tomar decisiones más acertadas y basadas en tus planes financieros, metas y posibilidades. Conoce más de cómo planearlos aquí.
Proteger tus finanzas: Elabora un contrato que no sea de chocolate
A pesar de que, como comentamos anteriormente, la mayoría de las personas acude a conocidos para pedir préstamos para evitar contratos y cláusulas estrictas o trámites engorrosos, hacerlo puede ser tu mejor salvavidas. Incluso puedes especializarte en esto y volverte prestamista. Si quieres sabes más al respecto, lee este artículo. Y si alguien acude a ti para pedirte prestado, lo mejor que puedes hacer es establecer de forma clara puntos como plazos de pago, intereses, fecha límite para la liquidación del pago, etc.
Transacciones: puntos por considerar
Sabemos que este punto puede resultar muy difícil cuando la transacción se da entre personas cercanas, de mucha confianza y familiares. Sin embargo, este consejo cambiará tu manera de relacionarte con los demás a través del dinero y te dará la seguridad y credibilidad que necesitas, además de proteger tus finanzas. Incluso, si eres las personas que pide prestado, sugerir este tipo de contrato hará que haya más confianza en ti como deudor. Estos son algunos puntos por considerar:
- Acordar con todos los involucrados si el contrato será hablado o por escrito. La segunda opción convierte la transacción en formal, además de se vuelve más segura y transparente al requerir firmas.
- Incluir cláusulas para los siguientes rubros: fechas de pago, montos de pago, plazo máximo para el pago total, intereses por atraso de pago, cantidad en cuestión y establecer la posibilidad de pago en especie.
- Te recomendamos siempre leer con cuidado las disposiciones que se incluyen en el contrato y verificar que ambas partes estén enteradas y de acuerdo con todos los puntos
- Asegúrate de tener, al menos, un testigo.
Con este punto te proteges a ti y a la otra persona de fraudes, incumplimientos de pago y problemas en la amistad o la relación. Quizás, al inicio, puede parecerte un poco exagerado, pero es necesario para proteger tus finanzas, como dicen…“Cuentas claras, amistades largas”. Puedes leer más al respecto en este artículo.
No estires más de tus límites
Este último punto es realmente importante, ya que, en situaciones en las que se quiere ayudar a un ser querido, muchas veces hacemos hasta lo imposible. No se trata de no dar lo mejor de ti, sino de saber tus límites. Protege tus relaciones interpersonales de los problemas derivados de los préstamos de dinero, y a la vez proteger tus finanzas. Recuerda no aceptar prestar una cantidad mayor a la que estés dispuesto a perder.
La razón de esta lógica de pensamiento es, simplemente, “prepararte para lo peor” ya que siempre está la posibilidad de que el dinero que diste no te sea devuelto. En estos casos puedes optar por tratar de implementar una prórroga de pago; puedes conocer más aquí. Pero si todo falla, y en el peor de los casos, si sigues esta regla, no perderás dinero de más. No pierdas por realizar una buena acción.
