Generación Z y millennials como los democratizadores de las finanzas

Generación Z y millennials como los democratizadores de las finanzas

Hace algunos años aún era necesario remitirse a las bibliotecas, los profesores y las aulas para poder aprender sobre economía y finanzas. Sin importar si el interés era con fines personales o profesionales, las inversiones, la bolsa de valores y los conceptos básicos de economías seguían reservados para unos pocos que contaban con los recursos económicos para aprender del mundo de las finanzas. 

Esa realidad ha cambiado gracias a la accesibilidad de las redes sociales que crece cada día, además de los temas infinitamente diversos que se puede aprender en ellas. Hoy en día, las redes sociales más utilizadas mundialmente están repletas de opciones de cuentas que buscan enseñar consejos, lecciones serias, casos de estudio y muchísimas cosas más acerca de las finanzas. Con el tema de las redes sociales, posiblemente lleguen a tu memoria los típicos tutoriales de YouTube que también son muy útiles para esto, pero aquí nos referimos a la proliferación de los consejos financieros en Facebook, Instagram, Snapchat y, sobre todo, TikTok. 

Las redes sociales son actualmente dominadas por personas pertenecientes a las generaciones Z y millenials que, usualmente, están dentro del rango de edad de 20 a 30 años. Entre los tipos de contenido cada vez hay más jóvenes inversores, economistas y financieros que apuntan a un tipo de público, usualmente joven e interesados en el mundo de las finanzas. Estos creadores de contenido tienen un impacto realmente importante que cambia el paradigma de la inclusión en el mundo de las finanzas. Con tan sólo seguir algunas de estas cuentas, puedes educarte de formas muy dinámicas y diversas, así como aprender de experiencias ajenas.

No obstante, en redes sociales como TikTok y Facebook ha habido casos de información engañosa, fuentes no confiables y algunos fraudes que hacen de los seguidores un blanco fácil para engaños. Por esta razón, se ha incitado a la prohibición de la promoción de plataformas o instituciones de inversión. 

Como todo, este nuevo paradigma tiene ventajas y desventajas, pero queda claro que el mundo de las finanzas se ha democratizado y las nuevas generaciones tienen mucho material para el futuro.