Educar tu cartera: ¿cómo hacerlo?
Si lo que quieres es conseguir estabilidad y tus objetivos y metas financieras, debes prestar atención a tus acciones y elecciones. Para hacerlo, deberás de invertir en educación, pero no de cualquier tipo, sino de este tema. Educar tu cartera es importante para dirigir el rumbo de tus decisiones. De esta manera contarás con información y las opciones que elijas serán más responsables. Esto te encaminará al éxito financiero con mayor facilidad. Aquí te ayudamos con un par de consejos.
Educar tu cartera: ¿qué implica?
Comenzar a administrar las finanzas propias siempre es un reto. Debemos conocer varios conceptos, aprender a gestionar distintas herramientas y productos, además de lidiar con bancos y entidades financieras varias. Esto puede convertirse en un reto, pero no tiene por qué ser inescapable. Es más, con la ayuda necesaria, el proceso de aprendizaje puede ser disfrutable y fructífero.
Para empezar debemos de entender qué significa educar tu cartera y tus finanzas. Una buena educación financiera te ayudará a:
- Gestionar adecuadamente tus finanzas personales
- Tomar el control de tus finanzas personales
- Tomar decisiones asertivas y responsables
- Incrementar y proteger tu patrimonio
Existen diferentes formas de empezar a hacer esto. Lo más importante es que comiences a familiarizarte con distintos métodos y herramientas de ahorro, inversión y crédito. Si quieres conocer más al respecto de qué es la educación financiera y cómo comenzar con estos productos, puedes leer este artículo.
¿Por qué educar tu cartera?
La realidad es que vivimos un mundo en el que no podemos escapar de las transacciones económicas. Por lo tanto, es importante que comprendamos, aunque sea de manera general, los procesos y herramientas que los rigen. De esta forma podemos aprovecharlas y sacarles el mejor provecho. Para lograrlo con éxito debemos de comenzar a investigar y acceder a educación financiera.
Si bien, es cierto que esto no es tan sencillo. Habrá quienes tengan acceso a recursos y herramientas desde su juventud; muchos pueden comenzar en casa. Pero también habrá quienes se enfrenten con productos y servicios financieros hasta la edad adulta. Además, a esto hay que sumarle la accesibilidad: no todos tenemos acceso a las mismas herramientas y productos, ya sea por la tecnología, los recursos o incluso la zona geográfica donde nos ubiquemos.
Si existe una clara desventaja en cuanto a la repartición de los recursos financieros, una forma de subsanar esta carencia es a través de la educación financiera. Es complicado, pero es un recurso que nos permitirá comprender mejor el mundo de las finanzas, su funcionamiento y cómo aprovecharlo. Con esto, adquiriremos experiencia y conocimiento y, de esta forma, podremos establecer metas y objetivos con responsabilidad, así como tomar decisiones de la misma forma. Puedes ahondar en las razones por las cuales educar tu cartera es imprescindible aquí. Otra brecha con respecto a la educación financiera es la de género, pero puede remediarse poco a poco. Conoce más al respecto en este artículo.
Educación financiera: recursos y productos
La educación financiera nos permite conocer los distintos productos, herramientas y servicios que ofrece el mercado. La primera parte es conocerlos y la segunda poder comparar y estudiar las opciones que existen. Hay tres elementos clave que sirven para llegar a la estabilidad económica y lograr nuestras metas financieras:
- Ahorro
- Inversiones
- Créditos
A partir de estos tres elementos podemos jugar con nuestras finanzas y así lograr distintos objetivos que nos propongamos. Puedes comenzar por buscar las opciones que los bancos ofrecen al respecto. Y comenzar a compararlas. Además, siempre viene bien asesorarse de los beneficios y ventajas que tienen. Pregunta quién es el cliente ideal que busca cada producto y descubrirás si es para ti. No tengas miedo de hacer preguntas, este es el momento indicado. Así lograrás obtener el conocimiento. Si quieres comenzar a aprender de los conceptos básicos de créditos y préstamos, puedes dirigirte a este artículo.
Educar tu cartera: cómo hacerlo
Al inicio, puede parecer que no hay forma sencilla de abordar el tema. Sin embargo, la educación puede comenzar desde tu casa. En la actualidad, el acceso a internet nos facilita el acceso a información de manera sencilla. Puedes comenzar buscando las principales entidades financieras, sus productos y servicios, así como sus características. De esta forma, conocerás la teoría y comenzarás a manejar los principales conceptos. El siguiente paso será saltar a la práctica y comenzar a operar y ajustar tus conocimientos. Pero puedes ir despacio. Si quieres saber más acerca de cómo ser autodidacta con la educación financiera, puedes leer este texto.
Ahora bien, también es necesario que sepas que invertir en tu educación financiera es clave. Esto no se refiere únicamente a hacerlo con dinero, sino con tiempo. Como te mencionamos, puedes comenzar con recursos gratis o a tu alcance. Si algo se te complica o quieres adentrarte en recursos más específicos, puedes buscar cursos y asesores. Pero recuerda siempre hacer tus investigaciones previas. Muchos sitios y bancos tienen una amplia cantidad de recursos gratis y de asesores disponibles para solucionar tus dudas. La experiencia que tienen es muy valiosa para aprender. Puedes leer más al respecto de la importancia de invertir en tu educación desde este enlace.
Educa tu cartera: Consejos extras
Existen distintas áreas de la educación financiera. Puedes comenzar por investigar:
- Cómo hacer presupuestos y establecer metas
- Las características de productos y servicios financieros
- Seguridad financiera: a qué prestar atención
- Establecimientos y entidades financieras
- Modelos económicos
Ve poco a poco y despeja las dudas que tengas en los distintos ámbitos que existen. Esto te dará una base para comenzar. Si quieres comenzar, te recomendamos leas más de nuestros artículos, así como los recursos e infografías que te proporciona Consubanco para conocer más de educación financiera. Puedes consultarlos desde aquí. Y recuerda, lo primero es invertir tiempo y paciencia, para cosechar los resultados de educar tu cartera.