Ahorro o préstamo: ¿cómo empezar mi negocio?

Ahorro o préstamo: ¿cómo empezar mi negocio?

Es muy probable que si estás considerando comenzar un negocio o proyecto personal te preguntes, ¿puedo sólo con mi ahorro o un préstamo es necesario? ¿Cuál es la mejor opción y cómo saberlo? Para tomar una decisión responsable, hay un par de cosas por considerar.

Primero que nada es importante que planees y definas bien el proyecto que quieres realizar. Establece tus metas y ponlas en papel, en tu computadora, o en algún sitio, pero hazlo. En este artículo puedes tener una guía de cómo establecer metas realistas. Define bien el rumbo que vas a tomar para que puedas planificar cuánto necesitas para comenzar. Una vez que hayas hecho esto, es momento de responder la pregunta.

Ahorro o préstamo: ¿qué elegir al comienzo?

Cuando vas a comenzar un proyecto personal o un emprendimiento, probablemente tienes muchas energías y confianza en que triunfará. Lo importante es mantenerlas cuando bajas ese sueño al mundo real. Un primer paso es generar un plan en el que detalles qué es lo que necesitas para comenzar: el mínimo para arrancar. Detallar esto nos ayuda mucho a saber cómo se materializará en el terreno financiero. En este artículo puedes revisar algunos conceptos útiles para antes de emprender y que este trayecto no sea tan difícil.

Muchos proyectos personales o emprendimientos no se materializan porque no logran su financiamiento inicial. Para evitarlo, pregúntate: ¿cómo estás comenzando? ¿Tienes alguna fuente de ingresos que te permita solventar los gastos iniciales o necesitas ayuda externa? ¿Ya comenzaste a ahorrar o apenas lo harás?

En este momento puede que también contemples la opción de complementar con un préstamo o crédito. Antes de tomar esta decisión, es importante que ya tengas cifras claras de cuánto necesitarás para iniciar. Si quieres más consejos en lo relativo a este tema, te dejamos este artículo acerca de qué hacer antes de aventarte al ruedo en un negocio.

Ahorro o préstamo: no tengo fondos

Quizás el ahorro es tu primer método de financiamiento para el proyecto. Aquí es importante que consideres en qué punto estás y tu capacidad para ahorrar. Si ya has comenzado y tienes un fondo, vas adelante. Además, en este enlace puedes conocer algunas de las distintas herramientas que existen para ahorrar. Así, puedes planificar cuánto tiempo te tomará llegar a la meta para poner tu negocio o proyecto. 

En caso contrario, comienza a ahorrar tan pronto como puedas. Eso significa desde ahora: ya.  Quizás estás pensando que no puedes y que apenas y te alcanza a cubrir tus gastos en este momento. Piensa entonces en cuándo podrías comenzar, aunque sea con cantidades muy pequeñas. Planifica una manera en la que puedas cortar gastos o aumentar ingresos. Este no es el inicio del ahorro, pero es el comienzo del plan de ahorro: un paso a la vez.

Algunos consejos para ahorrar son cortar los gastos hormiga y cambiar pequeños hábitos. Aquí te compartimos un par de ejemplos:

  1. Cambia algunos productos de marca por productos genéricos. Si puedes hacer esto en medicamentos es un buen inicio. 
  2. Planifica tus compras y rutas. Así puedes ahorrar en servicios de paquetería y entregas. Junta varias cosas para que sea una sola entrega.
  3. Cambia algunos hábitos y gastos diarios. Por ejemplo, puedes revisar la frecuencia con la que sales a comer, si gastas en antojos pequeños, cómo maximizar los ingredientes que ya tienes en casa, entre otras cosas. 

Al inicio puede parecer complicado. Sin embargo, piensa en tu plan de ahorro y los proyectos que conseguirás con eso. Haz un balance de qué puedes cambiar y qué no. Te darás cuenta que, tal vez, son acciones más pequeñas de las que esperas. Si quieres conocer más consejos y hábitos de ahorro, puedes leer este artículo.

Ahorro o préstamo: necesito un crédito

Si, a pesar de todo lo anterior, todavía sientes tu meta muy lejana, quizás sea momento de considerar seriamente un crédito. Puede que esto suene aterrador o desconocido. Sin embargo, un crédito bien manejado, puede ayudarnos a llegar más rápido a cumplir nuestras metas. 

No es necesario que elijas un método u otro para comenzar tu negocio o proyecto. Puedes usar ambas cosas: ahorros y créditos. Todo depende de la velocidad con la que quieras lograrlo, tu capacidad de pago, y la información que tengas. No veas a los créditos como algo malo, pero tampoco como una salida fácil. Es un préstamo que tendrás que pagar.

Consideraciones de los créditos

Por ello, te compartimos algunas consideraciones que deberías tener antes de aceptar o solicitar un crédito:

  1. Tipo de crédito. Elige e investiga acerca de qué tipo de crédito se adecua más a tus necesidades. Algunas de las opciones que existen son: créditos en cuenta corriente, créditos revolventes o hipotecas (para propiedades). Es necesario que los conozcas a fondo y las características que tienen en cada entidad financiera para entenderlos antes de aceptarlos.
  2. ¿Dónde conseguir el crédito? También es importante considerar a dónde dirigirte para pedir la información. Puede que sea la banca tradicional, pero también, hoy en día, existen muchas opciones digitales que son más amables con las tecnologías y los negocios (Fintech).
  3. Comparar opciones para elegir una opción que se adecue a ti. El proceso de investigación y recopilación de información es muy importante para llegar a lo que necesitas. No temas tardarte en tomar una decisión hasta haber considerado toda la información posible.

Tómate tu tiempo en entender los conceptos y características de cada opción. Si quieres conocer más información acerca de los créditos, sus tipos, y cómo conseguirlos, ve a este texto.

Como te mencionamos, no es necesario que elijas entre un método u otro para comenzar tus proyectos, negocios o emprendimientos. Lo importante es que consigas llegar allá. Planifica muy bien tus pasos y aterriza esas ideas. Compara información y así lograrás ver cuáles son las opciones más óptimas para el proyecto. Recuerda: es importante llegar a la meta, pero el proceso también es parte del trayecto.