Índice de precios al consumidor

Índice de precios al consumidor

El índice de precios al consumo (IPC) es un indicador económico que se encarga de medir la variación de los precios de los bienes y servicios de un lugar específico durante un lapso determinado. El IPC es creado y publicado por el Instituto Nacional Electoral (INE) y mide la variación de precios de la canasta básica de los hogares mexicanos. Este indicador se utiliza comúnmente para medir el impacto que tienen las fluctuaciones de los mercados financieros sobre la vida de las personas, da seguimiento a los precios durante un tiempo determinado y suele estar relacionado con víveres, textiles, transportes y otros productos y servicios.

En términos generales, el índice de precios al consumidor mide los cambios en los precios durante un periodo de tiempo y el principal gasto de las familias de un país. Este indicador se analiza periódicamente y puede incrementar o disminuir. Cuando los precios aumentan, el índice de precios al consumidor crece y cuando el resultado es negativo, quiere decir que los costos han disminuido. El índice de precios al consumidor (IPC) abarca distintos sectores y debemos tomar en cuenta ciertos elementos para comprobar su veracidad. 

Para comprobar la veracidad del índice de precios al consumidor (IPC), este debe comprender una muestra representativa de productos y servicios y debe ser medible. El índice de precios al consumidor debe poderse comparar con otros periodos de tiempo y otros lugares del mundo. 

El índice de precios al consumidor nos ayuda a entender, medir y analizar distintos elementos de la economía, incluyendo el empleo y la producción de bienes. Este indicador tiene un impacto directo sobre la vida de los habitantes del país y busca entender la influencia que tienen las fluctuaciones de los mercados financieros sobre los mexicanos. 

Para conocer el índice de precios al consumidor (IPC), el INE registra el precio de los productos y servicios de los hogares mexicanos a partir de una visita presencial. Los trabajadores del INE acuden a viviendas, almacenes, tiendas y ferias para conocer las particularidades de cada uno y obtener datos veraces. Una vez que se tienen cifras concretas, se realizan estadísticas y se interpretan los datos.