Las decisiones de nuestro vecino
Nuestro país ha estado buscando estrategias para impulsar el crecimiento económico. Nuestro gobierno ha intentado implementar distintos planes que no han sido del todo fructíferos. Nuestro primer mandatario parece tener una visión distinta de las finanzas mexicanas y no ha conseguido dar carpetazo a la compleja situación que estamos viviendo.
La economía mexicana ha sufrido un golpe monumental y al fin parece haber luz al final del túnel. El gobernador del Banco de México anunció recientemente que una recuperación del Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos, aunado a la implementación de estímulos fiscales, podrían ser elementos clave para nuestras finanzas.
Sabemos que la economía mexicana y la economía estadounidense están íntimamente relacionadas. Sabemos que lo que afecta a una economía tiene repercusiones sobre la otra. Sabemos que lo que beneficia a nuestro vecino del norte, de una u otra manera tendrá un impacto sobre nuestro país. Sabemos que ambas naciones están pasando por momentos económicamente complejos, pero las recientes elecciones norteamericanas podrían cambiar las reglas del juego.
La economía mexicana sufrió una sacudida monumental hace unos meses y sigue estando sumamente debilitada. Los habitantes mexicanos vivimos tras una cortina de incertidumbre y volatilidad que no parece desaparecer. El panorama económico es turbio y las proyecciones a corto plazo no parecen ser muy distintas. Las especulaciones del gobernador de Banxico podrían ser parte de la solución a este gran caos y, de ser ciertas, podrían cambiar la realidad de muchas familias mexicanas.
El camino hacia la recuperación está en marcha, por lo que debemos mantenernos como atractivo de inversión. Poco a poco estamos dando pasos hacia una mejor calidad de vida y hacia unas finanzas más estables y sólidas. Poco a poco debemos fortalecer nuestra economía y no permitir que la volatilidad de los mercados financieros nos golpee.
En fin. La realidad de la economía mexicana podría verse beneficiada a corto plazo; todo depende de las decisiones de nuestro vecino del norte.