La práctica podría ser muy distinta
Las cosas están por cambiar en materia financiera, pues el nuevo Paquete Económico trae grandes propuestas que pretenden beneficiar a la población mexicana. La economía de nuestro país podría verse mejorada, la confianza podría recuperarse y los contribuyentes menores podrían obtener una simplificación financiera. El panorama económico de nuestro país parece verse más claro y aquellos que realizan labores de empleo informales tendrán que pagar pequeños impuestos, pero las cosas no son tan simples como parecen. La teoría suena alentadora, pero no tenemos claridad y la práctica podría ser muy distinta.
Buscamos generar confianza, recuperar las grandes pérdidas económicas y encaminar a nuestro país por vías más certeras. Pretendemos que los profundos agujeros económicos se taparán sin más ni más, que las fallas gubernamentales se resolverán de la noche a la mañana y que el clima financiero de nuestro país comenzará a aclararse. Pensamos que una simple estrategia solucionará la problemática económica de raíz, pero aún tenemos cola que nos pisen.
El esquema económico actual no parece tener hacia donde ir y el horizonte se va nublando conforme pasan los días. Muchos buscan soluciones inmediatas con efectos a largo plazo, pues la tediosa situación económica se ha vuelto un dolor de cabeza. La población mexicana está cansada de la difícil situación financiera en la que vive y muchos ciudadanos están dispuestos a invertir en el Programa de Inversionistas Inmigrantes (EB-5).
La nueva óptica de muchos mexicanos va en torno a invertir en el programa norteamericano EB-5, pues buscan tener la oportunidad de colaborar en proyectos aprobados por el gobierno estadounidense y tener mejores alternativas de empleo, así como tener una inversión en dólares produciendo dólares. La teoría suena alentadora, pero, nuevamente, la práctica podría ser muy distinta.
La economía mexicana podría dar un giro radical, pero todo depende de las pequeñas decisiones que tomemos hasta que entre en vigor el Paquete Económico y de la manera en que el gobierno federal administre los nuevos recursos. Hay nuevas oportunidades en la mira, pero una buena organización es clave para impulsar el crecimiento económico de nuestro país.