Golpe a los pobres
El golpe a la pobreza ha sido monumental, los niveles de pobreza y pobreza extrema han crecido considerablemente y la falta de estrategias gubernamentales han dejado en la calle a infinidad de familias mexicanas. Las condiciones económicas de la población más vulnerable de nuestro país son deplorables, el dinero no les alcanza para adquirir la canasta básica y sus necesidades primordiales no logran ser cubiertas con dignidad.
Los retos son constantes, el día a día nos presenta un panorama extremadamente complejo y los desafíos son difíciles de rebasar. La población más vulnerable de nuestro país está en riesgo, la crisis económica sigue creciendo y no tenemos hacia donde movernos.
El gobierno federal ha dejado desamparada a gran parte de la población, a pesar de haber prometido cubrir con las necesidades básicas de los más pobres. Las prioridades iniciales de nuestro gobierno apuntaban hacia una protección especial para las familias más necesitadas, pero los apoyos no fueron suficientes, los programas sociales no surtieron el efecto deseado y la crisis económica aumentó.
Los efectos sobre los más pobres han sido en seco, los recursos no alcanzan para mitigar los efectos financieros del virus y el poco acceso a los servicios de salud está causando grandes embrollos. El plan de vacunación está en marcha y comenzó con relativa eficacia, pero poco a poco se ha ido desvaneciendo y falta un alto porcentaje de la población por vacunar.
La pandemia sigue haciendo de las suyas y no vemos claro hacia donde dirigimos nuestros esfuerzos. La crisis económica va en aumento y el gobierno federal no parece estar tomando las cosas con la seriedad que merecen. La responsabilidad está en el aire, el color del semáforo epidemiológico no es claro y no estamos dispuestos a hacer pequeños sacrificios a cambio de una mejor economía.