¿Euro o dólar?
(8de noviembre de 2019)
Si piensa apostar contra el resistente dólar en 2020, seguro tu dilema es qué comprar en su lugar. La respuesta, para algunos, es obvia: el euro.
Aunque uno y otro se comercializan más activamente en el mundo, las perspectivas para Europa no han sido exactamente destacables en los últimos tiempos. La zona euro ha estado luchando con una economía regional caída, las consecuencias de las disputas comerciales mundiales y los riesgos derivados de la incertidumbre del brexit, así como grandes franjas de deuda con rendimientos negativos.
Todo ello ha sido un lastre para el euro, que se ha quedado atrás de la mayoría de sus pares más importantes este año. Pero a medida que algunos de estos desafíos retroceden, la moneda es hoy, una vez más, una opción atractiva para algunos compradores, y en octubre tuvo su mejor mes frente al dólar desde principios de 2018. Las apuestas son que las mejoras graduales en el crecimiento y el progreso en las conversaciones entre Estados Unidos y China provocaría una sensación de riesgo e impulsaría el euro al alza.
“Un periodo de relativa estabilidad en las negociaciones comerciales” debería impulsar la moneda, asegura Francesca Fornasari, administradora de cartera en Insight Investment, que tiene $844.000 millones de dólares en activos bajo administración. También se esperan “mayores cambios en las políticas fiscales, como un medio para apoyar el crecimiento en Europa”.
En lo que va del año no ha sido buena idea apostar contra el dólar, ni siquiera ante las expectativas de que se debilitaría. El dólar se ha recuperado constantemente después de periodos de debilidad y alcanzó un máximo de más de dos años a principios de octubre. El mes antepasado, el euro cayó durante ocho de nueve meses. Y el índice Bloomberg Dollar Spot ha aumentado más de 0.5% en esta semana.
Aun así, algunos de los principales vientos en contra para el euro están disminuyendo. Tanto los funcionarios chinos como los estadounidenses han hablado positivamente sobre las negociaciones en curso para llegar a un acuerdo comercial preliminar, lo que podría estimular todavía más el ansia por el riesgo y eliminar la necesidad del dólar como refugio.
Por otra parte, la fecha límite para el brexit se ha retrasado hasta el 31 de enero, lo que elimina la amenaza de una salida sin acuerdo en 2019. La voz de Christine Lagarde, actual directora del Banco Central Europeo, ha sonado con mayor fuerza que la de su predecesor respecto a impulsar el estímulo fiscal para facilitar el crecimiento.
Estrategas de JPMorgan Chase & Co., liderados por Paul Meggyesi, dicen que están “explorando oportunidades” para posiciones largas del euro frente al dólar, pero siguen siendo cautelosos, en parte debido al malestar económico. El grupo se siente alentado por los datos que muestran que la zona euro registró un superávit anual récord en su saldo básico, una medida que incluye cuenta corriente, patrimonio neto y flujos netos de inversión extranjera directa. “Este superávit básico masivo debería amortiguar al euro contra una futura decepción económica”, escribieron en una nota el 1 de noviembre.
Los datos económicos de la zona euro han sido más fuertes de lo esperado recientemente y el índice Citi Economic Surprise para la región ha salido de un mínimo alcanzado el 10 de octubre, pese a que el indicador continúa mostrando que los informes están por debajo de las previsiones. Un repunte en los pedidos de fábricas alemanas se sumó a las señales de que la economía de la zona euro ha superado lo peor de sus problemas recientes.
Los patrones de precios también respaldan la idea de una recuperación del euro, según los estrategas técnicos de Citigroup Inc., entre los que se incluye Tom Fitzpatrick.