Efectos culturales
La pandemia llegó a los lugares más sorprendentes y se fue infiltrando en distintos sectores de la población. El pequeño virus viajó, aterrizó en nuestro país y causó grandes disturbios a nivel nacional. El mal manejo de la pandemia ha tenido grandes repercusiones sobre la economía mexicana, afectando severamente los niveles de pobreza de la población.
Los efectos económicos derivados de la crisis sanitaria golpearon con fuerza, el confinamiento inicial causó grandes estragos dentro de nuestro país y los cierres abruptos provocaron un desequilibrio financiero. El mundo cultural se vio afectado, los cines, teatros y museos cerraron y el consumo cultural cayó. Los eventos culturales fueron suspendidos y los costos para este sector se dispararon. Poco a poco se ha ido reactivando, pero las cicatrices son profundas y el impacto económico no deja de sorprendernos.
La situación económica de nuestro país va en proceso de recuperación, pero aún nos falta un largo trecho. La pobreza y la pobreza extrema van en aumento, millones de familias mexicanas viven al día y las estadísticas no reflejan la realidad tal cual es. Infinidad de hogares se han visto en la necesidad de ajustar sus cuentas, pues los recursos no parecen ser suficientes y el rezago educativo no ayuda.
Vamos por mejores vías y las proyecciones a futuro pintan más claras, pero el sector cultural sigue registrando pérdidas. La crisis sanitaria sigue presente y los efectos sobre la economía nacional persisten. El semáforo epidemiológico marca el destino de nuestros pasos y las actividades culturales no terminan por arrancar. Los gastos incrementan, el área cultural no parece ser indispensable y poco a poco va perdiendo fuerza.
Los efectos económicos de la pandemia siguen teniendo efecto, aunque los datos nos muestran un panorama más alentador. Lentamente vamos avanzando hacia un mejor escenario financiero, pero aún hay desafíos por cruzar y una gran problemática económica por resolver.