Jóvenes Construyendo el Futuro va por buen camino
Los programas rinden frutos y apoyan a la economía del país. En esta ocasión es turno de Jóvenes Construyendo el Futuro de mostrar sus avances en contratación de puestos laborales. Un alto porcentaje de los jóvenes que forman parte de este foro han conseguido un empleo y los encargados de sustentar este programa buscan incrementar las cifras implementando el “mes 13”. Esta iniciativa busca apoyar a los jóvenes becarios a través de talleres de capacitación y ferias de empleo. El objetivo final es lograr empleos formales.
El programa Jóvenes Construyendo el Futuro consta de varias etapas dentro de su proceso. Las estadísticas muestran que del total de los jóvenes que se inscribieron para formar parte del programa, algunos de ellos lograron conseguir un empleo formal. Para ser exactos, el 2.2% de los individuos enlistados encontraron un puesto laboral acorde a sus preferencias y habilidades.
La Subsecretaría de Empleo y Productividad Laboral prevé un incremento en las cifras en los próximos meses. El programa Jóvenes Construyendo el Futuro busca reclutar a aquellas personas que no forman parte de ninguna institución universitaria ni entidad de educación superior y que no tengan un empleo formal. Se enfoca en capacitar a los jóvenes en diversas áreas, siendo las más destacadas las áreas administrativas, científicas, culturales, deportivas, agropecuarias, ejercicio de oficios, ventas y servicios.
La beca otorgada a estos jóvenes tiene un plazo de un año de vigencia, es decir, doce meses. Posterior a este lapso, los jóvenes continúan con un acompañamiento durante un mes más, conocido como el “mes 13”. A fin de cuentas, lo que se pretende con este programa es aumentar las posibilidades de empleo dentro del país. Una mayor tasa de empleo se traduce en una mejor economía para México y una mejor calidad de vida a nivel financiero.
La sensación de productividad vale todo y el impulsar a los jóvenes mexicanos a formar parte de la cartera laboral es un ganar-ganar. Las estrategias utilizadas funcionan como un catalizador tanto a nivel individual y familiar, como a nivel nacional. La economía y las finanzas públicas se ven beneficiadas sí o sí, y la sensación de paz y estabilidad económica no tienen precio. La libertad financiera no tiene límite y, a través de programas como Jóvenes Construyendo el Futuro, se logra transmitir esta estabilidad.
A pesar de la situación económica que vive el país, siempre hay un rayito de esperanza. El potencial de empleo va en incremento y este programa lo sustenta. La productividad laboral y económica es posible utilizando las estrategias adecuadas.