Opciones ante la incertidumbre

No siempre tenemos claro el siguiente paso en términos de nuestras finanzas personales, pues suele haber elementos que pasamos por alto a la hora de tomar decisiones. Con frecuencia nos vemos parados entre la espada y la pared y no sabemos hacia dónde voltear para corregir nuestros desastres financieros. Queremos avanzar hacia la salud financiera, pretendemos vivir con tranquilidad económica, pero si no tenemos las herramientas adecuadas, difícilmente conseguiremos nuestras metas. 

El futuro de nuestras finanzas personales es nuestra responsabilidad, por lo que es fundamental que adquiramos la educación financiera necesaria para tomar decisiones congruentes. Es vital que nos informemos a través de fuentes confiables, que nos mantengamos actualizados y que hagamos uso de las estrategias que mejor vayan con nuestro estilo de vida. A pesar de todo, no siempre es fácil elegir, pues el universo financiero es sumamente extenso y necesitamos practicar para caminar sobre las vías adecuadas.

Si buscamos mitigar nuestros niveles de estrés financiero, debemos aprender a discernir y a acotar nuestras alternativas. Debemos cuestionarnos constantemente para decidir si determinado momento es mejor para ahorrar, para invertir o para gastar. En ocasiones nos conviene ahorrar para mantener nuestros niveles de liquidez a corto plazo y para poder planificar a futuro. Si optamos por ahorrar, es importante hacerlo a través de fondos de inversión y tomar en cuenta factores como las tasas de interés.

A veces la incertidumbre financiera permea en nuestras decisiones y no tenemos claro si invertir es la mejor alternativa. De pronto el escenario financiero no es claro y no queremos lanzarnos al ruedo y arriesgarnos. Pensamos que, para invertir, necesitamos contar con grandes montos de dinero y con altos conocimientos en materia financiera, pero la realidad es que invertir no es tan complejo si elegimos con inteligencia financiera y no pasamos por alto las distintas opciones de las cuales disponemos. 

Cuando pensamos que nuestras finanzas personales están bajo control y que tenemos todo medido, el universo puede cambiar y dañar nuestra historia, por lo que es fundamental hacer uso de nuestra educación financiera para proteger nuestros recursos, para gastar con consciencia y para contraer hábitos financieros sanos.