La motivación no falta
Muchos tenemos la motivación necesaria para impulsar nuestras finanzas personales y para incrementar nuestra calidad de vida. Muchos sabemos el camino hacia la libertad financiera y buscamos las vías más adecuadas para llegar a ella. Muchos tenemos nociones financieras elementales que nos permiten organizarnos mejor, mantener un equilibrio en nuestros bolsillos y alcanzar la independencia económica, pero pocos somos conscientes de la manera en que manejamos nuestro capital y no buscamos alternativas más sanas.
Tener hábitos financieros sanos es fundamental y entre antes los consigamos, mejor pronóstico tendremos. Adquirir hábitos financieros sanos no es tan complejo como suele parecer, pero debemos mantener el dedo en el renglón y no perder de vista los pequeños detalles. Muchos aprendimos hábitos financieros desde pequeños y logramos incorporar una educación financiera a nuestra educación tradicional. Muchos aprendimos recursos sumamente útiles para gestionar nuestras finanzas, pero los tiempos van cambiando y siempre hay nuevas herramientas y estrategias que podemos incorporar a nuestra rutina financiera.
Hay hábitos financieros que son imprescindibles y que, si conseguimos incorporarlos a nuestro ser, saldremos altamente beneficiados. Si logramos hacer pequeños cambios, nuestras finanzas personales podrían mejorar dramáticamente y estaríamos más cerca del éxito financiero.
Para comenzar a cambiar, necesitamos estar conscientes de nuestros conflictos financieros y tener presentes los errores que hemos cometido. Debemos evaluar nuestro estado financiero presente, identificar nuestro terreno y tomar control sobre nuestras finanzas personales. Debemos dedicar tiempo a nuestra educación financiera para desarrollar conocimientos nuevos y adquirir un lenguaje financiero aunado de estrategias útiles y conceptos elementales.
Si pretendemos dar un salto hacia la libertad financiera, es esencial que desarrollemos nuestras habilidades financieras, que aprendamos a tomar decisiones con inteligencia financiera y que incorporemos las estrategias a nuestro día a día. Si buscamos vivir con salud financiera y encaminarnos hacia la independencia económica, no debemos dejar a un lado la importancia de crear un buen presupuesto, debemos cumplir con nuestras obligaciones fiscales y tener muy presente la relevancia del ahorro.
La vida financiera no es tan compleja y solemos estar motivados, pero la motivación no basta, pues debemos estar conscientes de nuestros movimientos financieros y elegir nuestras estrategias con certeza. Debemos identificar nuestro límite de gastos para evitar endeudamientos innecesarios. Debemos buscar oportunidades para generar más ingresos e invertir parte de nuestros recursos. Debemos prepararnos para el futuro, aprender a planificar financieramente y encaminarnos hacia la independencia económica.