Desmitificando

Desmitificando

Todos tenemos ideas fijas y preceptos bajo los cuales regimos nuestro día a día. Todos tenemos reglas internas, mandatos individuales e ideas preconcebidas que nos cuesta trabajo romper. Nuestras finanzas personales son parte de nuestra esencia y nos acompañarán a lo largo de nuestro recorrido por la vida, por lo que debemos tener control sobre ellas y cuidarlas en todo momento. 

Nuestras finanzas personales guían nuestros pasos y tienen un impacto directo sobre nuestras emociones. Nuestra realidad financiera tiene un poder importante sobre nuestras decisiones cotidianas, sobre nuestra energía diaria y sobre nuestros sentimientos y pensamientos. 

Si queremos contribuir a nuestra paz interna y vivir con tranquilidad financiera, debemos adoptar hábitos financieros sanos, caminar con certeza financiera y enderezar nuestros conflictos económicos. Si nuestra meta es alcanzar la independencia económica, es importante que establezcamos bases sólidas, que elaboremos un presupuesto realista y que caminemos sobre tierra fértil.

Poco a poco iremos sembrando semillas que crecerán y nos acercarán al éxito económico, pero no debemos perder de vista la importancia de tener un buen presupuesto, de contar con un fondo para emergencias y de revisar nuestros movimientos financieros periódicamente. Debemos desmitificar lo que vemos y escuchamos, aprender a discernir la verdad de la falsedad y romper con mitos preconcebidos.

Si buscamos asegurar nuestro futuro e incrementar nuestra calidad de vida, debemos tener claro que todos necesitamos contar con un presupuesto y que saber administrar nuestros recursos es vital. Debemos entender que nuestras finanzas personales son parte de la vida y que podemos irlas enriqueciendo sobre la marcha. Debemos comprender que la vida es dinámica y que poco a poco nos iremos acercando a nuestros objetivos financieros. 

La clave del éxito financiero no radica en tener grandes conocimientos, ni un alto nivel de ingresos, ni sólidas habilidades matemáticas. Lo único que necesitamos es una buena actitud, una relación positiva con el dinero y una buena guía que nos permita mantener nuestros niveles de auto disciplina al margen.