El impacto de #UnDíaSinNosotras
La mujer es sumamente productiva, y su participación en el sector laboral lo demuestra. El pasado lunes nueve de marzo se llevó a cabo un paro nacional de mujeres. El impacto económico y social que generó el paro nacional #UnDíaSinNosotras fue mucho más alto de lo previsto. México se convirtió en un país fantasma y la capital fue una de las regiones en las cuales más se notó esta iniciativa. El movimiento en las calles disminuyó de manera radical. Al parecer, el proyecto tuvo resultados positivos.
Las mujeres mexicanas se unieron para hacer notar su presencia. Los centros laborales vivieron las consecuencias en carne propia. Algunos establecimientos lograron ingeniárselas, pero muchos otros tuvieron que cerrar sus puertas de manera anticipada. Algunos sectores realizaron un análisis previo y prefirieron suspender actividades por el día. Muchos optaron por trabajar de manera habitual, topándose con la noticia de que no tenían suficiente personal como para realizar las actividades cotidianas ni para ofrecer la calidad y la seguridad necesarias.
La ausencia de las mujeres se hizo notar. La gran mayoría de las mujeres mexicanas se unieron a este acto representativo con herramientas propias. Cada una vivió el día e hizo notar su ausencia. Cada una decidió levantar la voz de la manera en que mejor le hizo sentido.
El porcentaje de mujeres que forman parte del sector laboral es sumamente alto y, a través del paro nacional, las mujeres lograron manifestar sus sentimientos. Las mujeres están en constante búsqueda de igualdad y equidad y, al parecer, esta fue la manera en que lograron unirse. Las cosas no cambiarán de la noche a la mañana, pero aparentemente vamos transitando por las vías correctas. Las cosas deberán irse acomodando a su propio ritmo. Las condiciones laborales, sociales y económicas de las mujeres irán cambiando. El respeto a la igualdad de género tendrá que lograrse. ¿Qué sigue?