Ahorrando problemas
Todo comienza en nuestra mente y en la manera en que percibimos nuestro entorno. Todo comienza con la forma en que captamos la información del exterior y la internalizamos. Todo comienza con nuestras experiencias de vida y la manera en que anclamos conocimientos y aprendizajes significativos a nuestro ser. Todo comienza cuando entendemos la forma en que funcionamos, con la manera en que tomamos decisiones y con nuestra actitud ante nuestro capital.
Los seres humanos tendemos a buscar la manera más sencilla de afrontar el día a día y muchas veces nos complicamos la vida. Los seres humanos somos criaturas de hábitos y necesitamos cierta estructura para funcionar adecuadamente. Los seres humanos somos seres de rutinas que nos permiten sentirnos seguros y dar pasos con confianza. Los seres humanos necesitamos aprender a manejar nuestras finanzas personales de acuerdo con nuestras experiencias y a nuestras metas.
Existen pequeños trucos financieros que suelen ser sumamente funcionales y que nos permitirán incursionar en una cultura financiera sana sin más ni más. Existen pequeños trucos financieros que nos permitirán ahorrar, invertir y alcanzar la salud financiera. Existen pequeños trucos financieros que nos ofrecerán tranquilidad mientras transitamos por la vida con menor estrés. Pese a todo, es fundamental que nos situemos en nuestra propia realidad, conozcamos nuestra personalidad a detalle y tengamos claro que cada persona es un mundo y opera de manera distinta.
A algunas personas les funcionará llevar un registro detallado mes a mes, mientras que otras podrán hacerlo sin papel y lápiz. A algunas personas les funcionará imaginar su futuro y trazar un plan concreto, mientras que otras preferirán automatizar sus pasos para ahorrar sin darse cuenta. A algunas personas les funcionará entender la raíz de sus impulsos para no adquirir productos y servicios innecesarios, mientras que otras tienen más estabilidad emocional y una mayor fuerza de voluntad. A algunas personas les funcionará ir ahorrando poco a poco, mientras que otras optarán por ahorrar en grande, pero de manera menos frecuente. A algunas personas les funcionará limitar su límite de crédito, mientras que otras podrán prescindir de ello. A algunas personas les funcionará transformar su dinero en horas para tener un mayor control de sus finanzas, mientras que otras no necesitarán mandar esa señal a su cerebro. Algunas personas requerirán de motivación extrínseca para ahorrar, mientras que para otras la motivación intrínseca será suficiente.
En fin. Cada persona es un mundo y entender la raíz de nuestra personalidad nos ahorrará grandes problemas financieros.